Potenciaremos los sentidos de l@s niñ@s lo máximo posible, para que tengan mayor número de herramientas a la hora de aprender.
EL TACTO
El tacto es uno de los sentidos más importantes en lo que a efectividad de estimulación se refiere. Es, además, un sentido que nos permite muy diversas formas de actuación.
La estimulación táctil puede ir desde una sesión diaria de cosquillas, hasta los masajes hechos con diferentes texturas. Podemos masajear el cuerpo de nuestros hijos con las manos simplemente o utilizando aceites, polvos de talco, esponjas o cepillos muy suaves.
EL OLFATO
Es este uno de los sentidos al que menos atención se presta normalmente. Pero también es susceptible de estimular. No tenemos costumbre de comentar los olores con los que nos encontramos a diario, sin embargo es una excelente manera de desarrollar esta sensibilidad en nuestros hijos.
Podemos jugar con ellos en la cocina a adivinar olores, o utilizar frasquitos de esencias o aceites perfumados de los que se utilizan en los quemadores (los hay de olor a limón, mandarina, fresa, etc).
EL OÍDO
La música ha sido descubierta últimamente como un buen medio para fomentar el desarrollo integral del peque. Padres, pedagogos y psicólogos han comprobado que a través de la música se pueden estimular: el lenguaje (oral y corporal), la atención, la concentración, la coordinación motora (fina y gruesa), el seguimiento de instrucciones, las habilidades para sintetizar y analizar, y la creatividad. Además, se potencia y se desarrolla la expresión de emociones y sentimientos.
Debido a que l@s niñ@s perciben y se expresan de una forma conjunta, la educación auditiva se realizará con otras actividades y de múltiples maneras: a través del movimiento, la percusión corporal, los gestos, la expresión vocal, los dibujos y los colores.
EL GUSTO
Con el gusto ocurre otro tanto que con el olfato. Pocas veces hablamos de los sabores con nuestr@s hij@s. Un juego divertido es probar pequeñas porciones de alimentos con los ojos cerrados y adivinar de qué se trata. Cocinar y degustar a la vez también puede resultar muy didáctico y lúdico.